En una relación de pareja, aunque a veces por nuestra manera de funcionar no nos lo parezca, no hay garantías. Nunca podemos tener la total seguridad de que aquello va a funcionar siempre, de que nunca va a cambiar lo que sentimos, lo que tenemos o lo que estamos viviendo. Aunque ésta idea pueda parecer de antemano, evidente, muchas personas sufren por no haberla tenido en mente.
Tampoco se trata de que estemos viviendo el mejor momento de la relación y pensando en qué pasará si eso se acaba, claro que no, pero es algo que debemos asumir. Tenerlo en algun punto de nuestro interior. Puede que funcionemos y vayamos superando todos los huracanes que la vida nos depare, pero puede que no. Puede que se acabe el amor, que nuestros sentimientos por el otro cambien. Puede que llegue un punto en el que ya no veamos la vida de la misma manera. Puede que nuestros valores cambien y ya no sintonicemos con el otro. Puede que aparezca una tercera persona que nos arrastre sin darnos cuenta, fuera de nuestra relación. Pueden pasar muchas cosas que pongan fin a lo que en un momento nos parecía perfecto y eterno.
Las personas que tienen dependencia emocional, por ejemplo, al principio no pueden ni pensar en la idea de terminar la relación.
Y tener asumida ésta idea, va unido a ser conscientes de que los cambios estan en nuestro dia a dia. Como siempre digo: VIDA = CAMBIOS
Si no queremos aceptar ésta idea, vamos a sufrir muchísimo más de lo que deberíamos.
Sabemos que todos tenemos la capacidad de superar cualquier adversidad que se interponga en nuestro camino. Todos, sin excepción. Y partiendo de ésta idea, podemos comprender que si sufrimos demasiado por amor, debemos conectar con ésta parte fuerte que hay en nuestro interior y desde allí empezar a hacer cambios.
Está claro que hay relaciones que aparentemente son más difíciles de soltar. Cuando hay hijos, cuando hay una hipoteca a medias, cuando nos importa demasiado lo que piensen los demás.. Pero de todos modos, todo esto se resuelve. Si hay personas que lo consiguen es que todos podemos, por difícil que parezca.
También pienso que cuando una relación se acaba, es frecuente que éste final no coincida con el final emocional entre los dos. Es decir, toman la decisión un dia concreto y empiezan a gestionar el cambio, pero a nivel interior, a nivel emocional, saben que la relación hace ya tiempo que se acabó. Lo que pasa es que hay miedos (queramos admitirlo o no), necesitamos digerirlo, mentalizarnos, etc.
Precisamente porque no hay garantias, debemos tener claro que siempre que estemos en una relación, ésta pude terminar en algun momento. Y repito, tenerlo claro no significa estar pensando en ello noche y dia!
Y si se acaba una relación y nos venimos abajo, si no podemos soportar la idea, si nos deprimimos y nos cuesta mucho levantar cabeza, ya sea porque no comprendemos lo que ha pasado, porque no aceptamos o no creemos que nos hayan dejado de querer, o porque no sepamos como continuar nuestro camino solos, es mejor pedir ayuda.
En mi opinión, y os lo digo con absoluta sinceridad, seria muy bueno para la mayoria de nosotros ir a un psicólogo cuando terminamos una relación porque con un pequeño proceso podemos asimilar lo que ha pasado, aprender de la experiencia todo lo que podamos, y así empezar la siguente relación con más conciencia y muchas más posibilidades de éxito.
6 Comments
El amor no debe ser una condena a “cadena perpétua”, el amor es un sentimiento que debe ser SINCERO, y que puede ser finito. Las personas cambiamos con el paso del tiempo, y puede ser que nuestros sentimientos hacia nuestra pareja también cambien.
Mi experiencia personal???
Después de que una pareja se acaba, no se acaba el mundo, no se te va la vida (aunque a veces lo parezca, sobretodo al principio y sobretodo si eres una persona dependiente emocionalmente).
Y yo siempre he pensado que aunque para ambos miembros de la pareja sea un paso muy difícil de dar, siempre va a ser en beneficio de ambos. Si yo no soy feliz con mi pareja, no puedo hacerlo feliz a él, y por lo tanto ambos somos infelices… y qué necesidad tenemos de amargarnos la vida???
Ninguna ruptura es fácil, ni las que son de mútuo acuerdo, ni mucho menos las que se encabezan por una de las partes y a la otra no le queda más remedio que aceptarla… pero para eso, si es necesario, se puede pedir ayuda.
Como bien se dice… NADA ES PARA SIEMPRE, NI SIQUIERA LA VIDA… pués aunque no suene nada romántico, EL AMOR muchas veces no es HASTA QUE LA MUERTE NOS SEPARE.
Gracias por el post Silvia.
Cuando se termino mi matrimonio, fui al psicologo, no para superar en si el divorcio, sino para poder llegar a entender la cantidad de cosas que habia hecho y que no entendia porque las habia hecho. Diagnostico: dependencia. Hoy, doy mil gracias por haber ido a terapia. Soy feliz y he conseguido lo mas importante respetarme y ser feliz conmigo misma.
Ya llevo siguiendo tu blog unas cuantas semanas y me gusta mucho cómo escribes.
Hoy ya me he animado a participar con este comentario 🙂
Tristemente o afortunadamente es así: en una relación nuca hay garantías. Puede que esta incertidumbre sea la que mantenga viva la llama del amor en muchas parejas.
La dependencia emocional de la que hablas es muy mala, una de las causas de la infelicidad de mucha gente.
Un cordial saludo Silvia.
Daniel
Eva muchisimas gracias como siempre por tu interesante aportación!
Eloisa, tu testimonio es muy importante, porque ayuda a otras personas que estan viviendo una situacion parecida y tu experiencia es de lo mas válida! Muchas gracias por compartirla!
Daniel, me alegro mucho de que te hayas animado a dejar tu comentario en éste post! 🙂
Gracias a todos!
Silvia
pero entonces si pensamos que en cualquier momento una relacion de pareja puede acabar,(aunque lamentablemente es asi) nos estamos inyectando inseguridad…..pienso yo.
en mi caso…me dejaron…porque las diferencias ya eran incontables…4 años de noviazgo y ni un solo proyecto conmigo…decia “te amo y sos la mujer de mi vida pero somos y queremos cosas diferentes”..yo queria una vida con el…el no queria nada…
jamas entendi su forma de amar.