Establecer límites
Eleanor Roosevelt, dijo una vez que “Nadie puede hacer que te sientas inferior sin tu consentimiento”.
Lo cierto es que es muy difícil que lleguemos a la verdadera realización personal, si no establecemos unos límites claros y firmes con nuestro entorno. Esto significa determinar hasta donde pueden llegar los demás en su trato contigo. No son límites para protegerte, sino para respetarte a ti mismo y sentirte lo mejor posible.
Ya sea con un directivo de nuestra empresa, con nuestra pareja, con un amigo, un cliente… todos hemos experimentado alguna vez esa mezcla de rabia y frustración, al sentir que alguien se relacionaba de manera abusiva con nosotros. No hemos reaccionado, y esto ha aumentado nuestra ira.
TALANE MIEDANER en su libro Coaching para el Éxito, nos propone que cuando sintamos que alguien no nos respeta, primero le informemos de ello, con elegancia y educación, para que el otro lo sepa. Si aún así continua igual, que le pidamos que por favor no haga esto y si aún insistiendo sigue igual, que nos vayamos. No tenemos por qué tolerarlo.
La clave está en el tono de voz. Hay que hablar con un tono de voz neutro. Ni levantar la voz, ni hablar más bajo de lo habitual. Solo así, podrás decirle qué quieres a la otra persona, sin generar un conflicto.
Y tú, ¿qué límites quisieras establecer ahora que sabes como protegerte con elegancia?