Ya no necesitas sufrir por amor
Me gustaría empezar este post, con un enorme y profundo agradecimiento a todos los que visitáis este espacio a menudo y especialmente a los que dejáis comentarios compartiendo vuestras experiencias, vuestras dudas o vuestras tristezas. Son de un grandísimo valor. !Gracias a vosotros, hemos llegado ya a las más de 1500 visitas diarias!!
Pretendo que sea un rincón en el que podamos nutrirnos entre todos y que nos permita mejorar la calidad de nuestras relaciones (tanto la relación de pareja como la relación con nosotros mismos).
Supongo que os dais cuenta que al final, a todos nos pasa más o menos lo mismo y aunque uno pueda sentirse avergonzado por lo que está viviendo, en realidad no tiene por qué.
Se trata de aprender a buscar nuestro camino siempre desde respetarnos y exigir respeto, desde cuidarnos y exigir que nos cuiden, de tratarnos bien y no permitir que nos maltraten, de reconocer nuestros talentos y no dejar que nos infravaloren o nos menosprecien.
En la relación de pareja, es donde los seres humanos somos más vulnerables, donde desaparecen nuestros límites con mayor facilidad y donde más sufrimos. Y es que sufrir por amor, casi se ha convertido en algo que la gente ve como “normal” o “habitual” y para nada tendría que ser así. Nada tendría que estar más lejos de la realidad.
Que nuestra pareja nos diga que necesita tiempo, que quiere alejarse de nosotros y probar si se siente bien con “esa otra persona” que ha conocido y le atrae muchísimo, que nos diga que de momento quiere separarse pero aún así sigue en contacto con nosotros (por si acaso nos quisiéramos alejar) mientras está con la otra…¿Dónde me sitúo yo en este escenario? ¿En la figura de aquel que deja que le pisen su amor propio y malvende su dignidad? JAMÁS TENDRÍAMOS QUE PERMITIR ÉSTO
Que en el tiempo que llevamos juntos nos ha dicho unas cuantas veces que nos ama tantísimo, que gracias a nosotros se siente por fin feliz, que somos lo que siempre ha estado buscando, etc. mientras nos demuestra con sus actos que no le interesamos lo más mínimo, no nos cuida, no nos respeta y no nos hace sentir importantes…¿Cual de las dos partes nos vamos a creer? TÁPATE LOS OÍDOS Y MIRA. Jamás creas lo que te dice, si no encaja con lo que hace. No te olvides que lo que te da la información real de lo que hay, son los actos.
Que empezamos una relación y el otro corre mucho, enseguida nos encontramos que estamos viviendo juntos, quiere conocer a nuestra familia, hacer planes de futuro y todo parece perfecto pero un buen día, sin saber muy bien por qué todo se acaba…¿Qué pasó? Debemos preguntarnos si lo conocíamos bien, si podíamos confiar realmente en que sus sentimientos eran honestos de verdad. Está claro que si estamos bien, tenemos que dejarnos llevar y disfrutar, pero para ello: NI ES NECESARIO CORRER, NI TENDRÍAMOS QUE PERDER LA PERSPECTIVA DE LA REALIDAD (que durante el primer año de relación, lo estamos conociendo). No sabemos quién es de verdad hasta que no hayamos pasado todo tipo de situaciones (buenas y malas).
En definitiva, sufrimos mucho por amor y no tendría que ser así. Amar no es sufrir, quien te ama no te hace llorar sino justo al contrario. Quien te ama va a querer tu bien, te hará crecer, te tendrá en cuenta, te cuidará, te apoyará y estará a tu lado pase lo que pase.
Todo lo que no sea esto, te hará sufrir y por lo tanto, NO ES AMOR.